– 450.000 personas podrían padecer enfermedad celíaca y solo el 10% está diagnosticado.
– El celíaco gasta 1.434,24 euros más al año en la cesta de la compra que el resto de la población española.
Madrid, 27 de mayo de 2009. – La enfermedad celíaca es una intolerancia permanente al gluten, y la enfermedad crónica intestinal más frecuente en España.
El gluten es una proteína que se encuentra en el trigo, cebada, centeno, espelta, kamut, triticale y posiblemente avena.
La ingesta de gluten produce una atrofia de las vellosidades del intestino que conlleva una mala absorción de los nutrientes (proteína, grasas, hidratos de carbono, sales minerales y vitaminas).
El único tratamiento es llevar una alimentación exenta de gluten durante toda la vida, de esta manera se consigue la normalización clínica y funcional de la enfermedad.
Gracias al esfuerzo de muchos profesionales de la medicina y de las asociaciones de enfermos celíacos y de la propia FACE se está consiguiendo que esta enfermedad sea más conocida y se diagnostique mejor. Se estima que una de cada cien personas es celíaca. Por ello más de 4.000 personas son diagnosticadas anualmente en España. Aún así, se estima que aproximadamente el 90% de los celíacos españoles desconoce que padece la enfermedad.
La dieta sin gluten se consigue mediante el consumo de productos naturales como carne, pescado, frutas, verduras, leche, y productos especiales aptos para celíacos elaborados a partir de harinas de maíz o arroz (pasta, pan, galletas, dulces, bizcochos…). Deben evitarse, en principio, aquellos productos manufacturados o manipulados por la industria en los que no se tenga una total garantía de su composición o de su forma de elaboración.
Afortunadamente contamos en España con una industria pionera mundial en la fabricación de productos especiales seguros para los celíacos y varios cientos de empresas comprometidas en la elaboración de alimentos sin gluten. Aún así, el 80% de los productos elaborados que encontramos en las estanterías de los supermercados no son aptos o no ofrecen garantías de seguridad para su consumo por celíacos.
El seguimiento de una dieta sin gluten supone en el año 2009 un sobrecoste de 1.434,24 euros en la cesta de la compra.
Al tratarse de una alimentación especial, la vida social del celíaco se encuentra restringida a unos pocos locales de restauración que ofrecen menú apto para celíacos, y es frecuente que el celíaco salga de casa con su comida preparada.
Si es cierto, que gracias a la labor de la FACE y de las Asociaciones de celíacos, cada vez existen más hoteles y restaurantes que conocen como elaborar menús sin gluten y donde el celíaco puede sentirse tranquilo, ya que conocen sus necesidades y están preparados para que se sienta como uno más. Aún así, el comer fuera de casa sigue siendo un gran problema y una fuente de ansiedad para muchos celíacos.
Hoy, 27 de mayo, día nacional del celíaco, queremos agradecer a todos esos profesionales de la sanidad, de la industria alimentaria, de la hostelería, de las distintas administraciones que con su sensibilidad y dedicación han colaborado con nosotros en hacer la vida del celíaco más fácil.
Aún así, hoy todavía podrás reconocer a un celiaco en la persona que se ha parado frente a un lineal en el supermercado y consulta un libro con listas de alimentos aptos para celíacos, o en el que pregunta al camarero cómo están fritas las patatas o en el que parece vivir en el centro de salud, de consulta en consulta, en busca de un diagnóstico.
El trabajo del colectivo celíaco y la colaboración con los diferentes profesionales ha hecho que la vida normalizada del celíaco sea más accesible. Todavía nos queda mucho camino que recorrer para que en vez de accesible, sea lo habitual.
Por ello seguimos reclamando:
- Una mayor implicación en la resolución de los problemas relativos a la seguridad alimentaria y al etiquetado de todos los productos que consumimos.
- La inclusión de productos específicos sin gluten en las prestaciones sanitarias españolas, para proteger la salud de los celíacos al igual que se protege la salud del resto de ciudadanos españoles.
- Campañas de información a la población general sobre la enfermedad celiaca.
- Mayor implicación en el diagnóstico y seguimiento del enfermo celíaco en atención primaria y especializada.
- La obligatoriedad de incluir menús aptos para celíacos al menos en comedores y cafeterías de los organismos públicos, centros escolares, universidades, hospitales, estaciones, aeropuertos y la recomendación de incluir dichos menús en todos los establecimientos de restauración.
- El fomento de la investigación analítica y clínica.
POR UNA MEJOR CALIDAD DE VIDA
Juntos lo lograremos
Iñaki Santamaría
Presidente de FACE