¿Sabías que las personas celiacas hospitalizadas en el Hospital Comarcal de Melilla deben ocuparse de llevar su alimentación? Esta supone una de las muchas situaciones de desigualdad que vive el colectivo de celiacos en su día a día.
Por este motivo, la presidenta de la Asociación de Celíacos de Melilla (ACEME), María Luisa Santamaría, ha mantenido una reunión con el director territorial del Ingesa, Francisco Robles, para revisar la alimentación de los celiacos ingresados en el Hospital Comarcal de Melilla. Además, la presidenta ha insistido en la importancia de la detección precoz de la enfermedad. Para conocer mejor los objetivos de esta reunión, FACE ha entrevistado a María Luisa:
P: ¿Por qué es importante esta reunión con el Director Territorial del INGESA (Instituto de Gestión Sanitaria)?
Para ACEME resulta fundamental no sólo por tratar la problemática que incide sobre la comida del celiaco en los establecimientos sanitarios dependientes de la Seguridad Social (de quien su vez depende INGESA), también es importante por lo que conlleva de acciones conjuntas con este organismo público para llevar a cabo campañas de detección precoz de la celiaquía, la posible creación de la figura de un asesor de los celiacos que trabaje de manera conjunta con los especialistas de digestivo y otras tantas iniciativas que, desde ACEME, hemos puesto sobre la mesa al responsable de INGESA Melilla, Francisco Robles.
P: ¿Qué supone para las personas celiacas el hecho de no tener un menú sin gluten al estar ingresadas en el Hospital Comarcal de Melilla?
Supone, en primer lugar, una paradoja que en un establecimiento sanitario un paciente se vea discriminado a la hora de comer por, precisamente, una enfermedad. En segundo lugar, genera un enorme trastorno, no sólo al paciente que ya de por sí está ingresado con una dolencia, sino también al entorno familiar que ha de suplir el papel que se supone que debería hacer en el propio hospital dando de comer a los enfermos ingresados. Y, además, añade una preocupación más a los familiares, elevando así el nivel de estrés en una situación de ingreso que de por sí misma resulta preocupante. En resumen, podemos decir que todos los factores producen una situación de desigualdad que a todas luces no parece razonable en pleno siglo XXI y que precisa corregirse.
P: ¿Qué sensaciones tenéis desde ACEME tras la reunión?
ACEME se siente muy satisfecha con el encuentro y esperanzada en que esta situación, que lleva enquistada dese hace años, tenga solución en breve. De esta forma y para mostrar nuestra predisposición al diálogo, desde nuestra asociación hemos dado todas las posibilidades tanto para la formación como el asesoramiento para que se lleven a cabo cuanto antes acciones con las que corregir la ausencia de menús sin gluten en el Hospital Comarcal de Melilla. En este sentido la receptividad, interés y sensibilidad mostradas por Francisco Robles nos hace ser optimistas en la consecución de las demandas que ACEME le ha realizado y terminar así con años de problemas para los celiacos y sus familias a la hora de ingresar en el hospital o, simplemente, en el momento del diagnóstico y del asesoramiento posterior al mismo. En resumen, podemos decir que la luz al final del túnel parece estar más cerca.
