La enfermedad celiaca se define como una enfermedad inflamatoria crónica dependiente del gluten en la que se ve dañado el intestino delgado, esta enfermedad tiene anticuerpos específicos en individuos genéticamente susceptibles. La causa subyacente es una reacción inmune mediada por las Células T que normalmente se origina en la infancia o temprana adolescencia debido a un grupo de proteínas procedentes del trigo, centeno y cebada.
Como respuesta a la ingestión de gluten en la enfermedad celiaca el sistema inmune ataca al propio organismo para erradicar un alimento que debería de ser inocuo, como si de una bacteria o virus peligroso se tratase. Los síntomas de la enfermedad celiaca no mejoran si se sigue consumiendo gluten pudiendo causar síntomas digestivos, deficiencias nutricionales que a veces resultan en anemia y osteoporosis, así como una gran variedad de complicaciones en otras partes del cuerpo que pueden llegar a ser graves.
Las pruebas genéticas indican que la mayoría de las personas diagnosticadas con enfermedad celiaca tienen los dos genes que codifican la proteína de reconocimiento inmune llamado HLA-DQ2.5, EL 10% restante de los pacientes tienen genes para el HLADQ2.2 O DQ8. Estas proteínas de reconocimiento inmunitario se unen selectivamente y presentan fragmentos de péptidos del gluten reconocido por las células T, lo que produce la reacción inmune que causa la enfermedad celiaca.
Actualmente, el diagnóstico de enfermedad celiaca implica un análisis de sangre para la detección de anticuerpos específicos, seguido de una gastroscopia y biopsias del intestino delgado que se examinan para determinar el daño inflamatorio típico de la enfermedad celiaca no tratada. Desafortunadamente, estos métodos son invasivos, y pueden llevar a confusión si se ha eliminado el gluten de la dieta durante un período prolongado, ya que los niveles de anticuerpos y el daño intestinal tienden a normalizarse sin la exposición esta proteína.
Con un número cada vez mayor de pacientes diagnosticados con enfermedad celiaca, existe una necesidad creciente de tratamientos y diagnósticos mejorados y menos intrusivos. El único enfoque terapéutico disponible en la actualidad es una dieta estricta y sin gluten durante toda la vida que puede resultar difícil de llevar sobre todo a los recién diagnosticado.
ImmusanT (compañía de biotecnología) ha mapeado las partes de las proteínas nutricionales del gluten que causan la activación inmune no deseada en pacientes con enfermedad celiaca de acuerdo con sus antecedentes genéticos.
Nexvax2® es una combinación de tres péptidos patentados que provocan una respuesta inmune en pacientes con enfermedad celiaca que llevan el gen de reconocimiento inmunitario, HLA-DQ2.5, que representa la condición en 80% a 90% de los pacientes. Nexvax2® se administra por vía intradérmica como una vacuna terapéutica y reprograma las células T que responden a antígenos de gluten en pacientes con celiaquía para que dejen de responder de manera defensiva y no se desencadene una respuesta proinflamatoria. Al evitar que las células T sigan causando inflamación en el intestino delgado, el tejido dañado sana y los pacientes podrían seguir una dieta sin restricciones y disfrutar de una mejor salud. Las inyecciones de refuerzo de Nexvax2 ® ofrecerían refuerzos periódicos del tratamiento para establecer una tolerancia prolongada al gluten.
ImmusanT ha completado recientemente dos ensayos clínicos de Fase 1b de seguridad, tolerabilidad y farmacodinámica, que proporcionaron datos sin precedentes que respaldan la prueba de mecanismo y eficacia. Específicamente, se descubrió que Nexvax2® interaccionaba con células diana específicas de antígeno. Después de la dosificación repetida, los pacientes que recibieron Nexvax2® se apreciaron diferencias de la prueba con gluten en contraste con el placebo.
Actualmente, Nexvax2® es la única terapia modificadora de la enfermedad celiaca en desarrollo clínico que podría permitir a los pacientes celiacos regresar a una dieta con gluten, buena salud y una mejor calidad de vida.
