Tras recibir el diagnóstico de enfermedad celiaca, es normal que surjan dudas: ¿Cómo llevar bien la dieta sin gluten? ¿Hay otros tratamientos? ¿Debo cambiar mi estilo de vida? ¿Qué complicaciones puede haber?
En la búsqueda de respuestas, muchas personas recurren a internet, pero allí abundan tanto la información útil como la desinformación. Por eso, si te surge alguna duda consulta a fuentes especializadas y de rigor como tu médico o tu asociación de celiacos. Estos son algunas de las informaciones incorrectas sobre la enfermedad celiaca que más abundan en internet y las redes:
«Soy intolerante al gluten»
En realidad, la intolerancia al gluten no existe. La enfermedad celiaca tampoco es una intolerancia, sino una patología autoinmune. En las intolerancias suele haber una causa metabólica, como la falta de una enzima para digerir un componente alimentario (por ejemplo, la lactosa). En cambio, en la celiaquía, el consumo de gluten provoca la activación del sistema inmunitario y se genera una respuesta inflamatoria que daña las células del intestino.
«Soy muy poco celiaco/a”
La enfermedad celiaca no tiene grados. Eres celiaco o no lo eres. Que algunos pacientes tengan más síntomas que otros no significa que la enfermedad sea más “leve” o “grave”. En todas las personas con enfermedad celiaca tiene lugar la reacción autoinmunitaria y la destrucción de las vellosidades intestinales, como consecuencia todos los pacientes pueden sufrir las mismas complicaciones a largo plazo.
“Un poco de gluten no hace daño”
Por un poco sí que pasa. Los pacientes celiacos no se pueden exponer al consumo de gluten. Puede que no manifiestes sintomatología tras consumir gluten, pero siempre se produce la activación de tu sistema inmunitario y por tanto se produce daño intestinal. Recuerda que transgredir tu dieta tiene consecuencias más allá de posibles molestias intestinales, como problemas de infertilidad, anemia persistente, aumento del riesgo de desarrollar cáncer…
“Existen pastillas que permiten comer gluten”
En el mercado se promocionan suplementos “anti-gluten”, pero no han demostrado eficacia en el tratamiento de la celiaquía. Aunque contienen enzimas que ayudan a degradar el gluten, no se garantiza que lo eliminen completamente. Por tanto, siempre pueden quedar pequeños fragmentos de la proteína del gluten capaces de activar el sistema inmunitario y por tanto de desarrollar la enfermedad.
“La enfermedad celiaca solo aparece en niños”
La enfermedad celiaca puede debutar en cualquier momento de la vida. No es un problema que se manifieste únicamente durante la infancia. De hecho, el diagnóstico tardío es cada vez más común, ya que la variabilidad de la sintomatología puede hacer que la enfermedad pase desapercibida. Es fundamental que tanto adultos como niños se realicen pruebas diagnósticas si presentan síntomas o si se ha diagnosticado recientemente a un familiar de primer grado con esta enfermedad.
Conclusión
La enfermedad celiaca no es una moda, ni una intolerancia, ni una condición que “depende de la cantidad”. Es una enfermedad autoinmune que requiere un único tratamiento eficaz: seguir de por vida una dieta estricta sin gluten.
Para resolver dudas y evitar caer en mitos, lo más recomendable es acudir a profesionales de la salud y asociaciones de celiacos, que ofrecen información fiable y actualizada.
Autora: Teresa Bermejo, Departamento de Comunicación y Divulgación Científica de FACE
Más información: celiacos.org