Marcó un antes y un después en la historia de la enfermedad celiaca
Este médico inglés, en la actualidad es conocido casi exclusivamente por su famosa publicación «On the coeliac affection«, cuya excelente descripción de la enfermedad celiaca la puso en conocimiento la sociedad y despertó el interés de la comunidad científica por esta patología. A pesar de su gran contribución a la investigación de la enfermedad celiaca, es justo destacar que también fue un médico que contribuyó a los avances médicos de la época con diferentes publicaciones sobre otras patologías y temas médicos.
El Doctor Samuel J. Gee, fue un pediatra inglés que nació el día 13 de septiembre de 1839 en Londres, donde desarrolló toda su carrera profesional, y falleció el día 3 de agosto de 1911 en la localidad inglesa de Keswick a los 72 años de edad.
Su padre, William Gee, fue un hombre de negocios de la época, aunque la familia Gee estaba considerada adinerada. De niño, Samuel cursó dos años de educación primaria reglada complementada con educación en casa.
Publicación de»On the coeliac affection» en 1888
El joven Samuel Jones Gee comenzó sus estudios de medicina en el University College Hospital de Londres en el año 1857, finalizando sus estudios tan solo cuatro años después, en 1861. Despertó muy pronto su interés por la pediatría y las enfermedades que afectaban a los niños, por lo que comenzó a trabajar desde muy joven en el prestigioso Hospital para niños enfermos de de Londres. Obtuvo su doctorado en 1865, siendo nombrado miembro del Royal College of Physicians. Un año después de su nombramiento, comenzó a trabajar en el St. Bartholomew´s Hospital, publicando en la revista de este Hospital su célebre artículo sobre la enfermedad celiaca en el año 1888. Tan solo un año antes, había dado una conferencia sobre el mismo tema en el Hospital para niños enfermos de Londres, dando visibilidad a la enfermedad celiaca, un patología conocida desde muchos siglos antes.
El doctor Samuel Gee indicó que el término celiaco fue utilizado por vez primera por el médico Areteo de Capadocia, quien, en la segunda mitad del siglo II antes de Cristo, ya hacía mención a la enfermedad celiaca. De hecho, el término «celiaco» procede de la palabra griega «koiliakos» (abdomen), la cual describe un síntoma característico en los niños que presentan esta patología y que es la distensión abdominal. Los escritos de Areteo de Capadocia fueron rescatados y traducidos por Francis Adams en 1856, lo que ayudó a que fueran estudiados por Samuel Gee, unos años después.
Preguntas que no pudo responder
En su escrito, Samuel Gee no solo hace una completa y excelente revisión de los síntomas y signos propios de la enfermedad celiaca, si no que además, se formula una serie de preguntas que comenzaron a tener respuesta a partir de la segunda mitad del siglo XX.
Samuel Gee sospechaba que la enfermedad celiaca se debía a un trastorno en la dieta, pero no sabía cual. Fue en el año 1950 cuando William Dicke, un pediatra holandés, demostró la relación entre la ingesta de determinados cereales y la presentación de la enfermedad.
Otras cosa que observó es que el origen del trastorno era complejo y que la forma de manifestarse la enfermedad celiaca podía ser bastante diversa, tanto en niños como en adultos. Además, comprobó que en familias con varios niños que seguían una misma dieta, solo presentaba la enfermedad uno de ellos.
También Gee sospechaba que algún trastorno relacionado con el intestino era una de las causas principales relacionadas con los problemas que padecían los niños celiacos, pero no pudo llegar a demostrarlo. Fue en el año 1954, cuando el patólogo ingles, Julian Paulley, describió por primera vez la atrofia de la mucosa intestinal característica que presentaban las personas celiacas que consumían una dieta con gluten. En esa misma época se fueron desarrollando técnicas para el estudio de la afectación, como a biopsia intestinal, las cuales han ayudado tanto al diagnóstico y al control de la enfermedad como al conocimiento de la patogenia de la misma.
Desde los años 70 hasta hoy, el conocimiento sobre la enfermedad no ha hecho más que aumentar gracias a la labor numerosos investigadores e investigadoras de diferentes países. Todos los descubrimientos recientes, como el desarrollo de los marcadores serológicos para el diagnóstico, el descubrimiento de los genes de susceptibilidad HLA DQ2/DQ8, el descubrimiento del autoantígeno transglutaminasa tisular y el inicio de múltiples líneas de investigación alternativas a la dieta sin gluten, han supuesto un extraordinario avance en la calidad de vida del colectivo celiaco y nos hace confiar en una posible cura para la enfermedad en los próximos años.
Y todo esto, sin duda, se lo debemos a la persona que marcó un antes y después en la historia de la enfermedad celiaca, el doctor Samuel Gee.
Bibliografía:
Ortigosa del Castillo, Luis. HISTORIA DE LA ENFERMEDAD CELIACA (1). Samuel Gee (2018). ResearchGate.